martes, 27 de marzo de 2012

Todavía creo



Podría escribir creyendo
O podría perder la fe…
Pero hoy prefiero
Darme una oportunidad.
Y seguir escribiendo.
Y seguir creyendo.
Creyendo en mí,
Creyendo en el futuro,
Creyendo en Dios
Y creyendo en los hombres.
Porque no todo está ya escrito
Ni todo está dicho ya.
Porque aún me quedan sueños
Y, si me levanto,
Sé que aún me quedan fuerzas,
Y que son esas fuerzas
Las que harán que mis sueños
Dejen de serlo, porque hoy
Decido que se hagan realidad.

martes, 20 de marzo de 2012

Gris



La mente intenta desconectar, relajarse, darse una tregua, huir a esos "otros mundos", a cualquier mundo que la aleje del gris oscuro casi negro. Da igual que sea a través de "agujeros de gusano", de universos paralelos, de "creer para ver",... pero, irse, huir del aquí y ahora. Pero el corazón se niega, cabalga desbocado hacia ningún lugar pero a la búsqueda sin remedio de una respuesta. 
¿Quién cambió nuestra plácida realidad por esta pesadilla en ciernes?
¿Quién se ha otorgado el derecho de acaparar la Esperanza, de gravarla con un impuesto vital tan sólo por intentar atisbarla?
Teníamos un bonito lugar en el mundo en el que vivir, por el que luchar y desde el que intentar catapultarnos al futuro a través de nuestros sueños, con nuestra lucha, con nuestra entrega, con nuestra ilusión,...
Pero el Sol ha huido...  
La lluvia que encierra, la que deprime, la que aisla, nos envuelve, ahogando cada día un poco más el brillo de los días y de los sueños. Ya ni siquiera existe la lluvia que fecunda, la que otorga vida, la que prepara un escenario primaveral que hace que esperar valga la pena,... y cada vez nos lleva un poco más al gris como respuesta.
¿Quién ha secuestrado la Alegría?
Y... sin embargo, todavía guardo la Esperanza de que hay semillas que brotarán en el desierto...

domingo, 4 de marzo de 2012

Hoy es un día muy especial




Hoy algo ha cambiado…

Hoy siento que atesoro más vida, más expectativas, más sueños por cumplir y más determinación para cumplirlos. Porque a partir de hoy soy más responsable de mi vida, de mis dudas, de mis certezas, de mis planes y de mis utopías.

Ha pasado sólo una hoja en el calendario pero ya nunca volveré a ser la de ayer y a pesar del miedo que eso puede conllevar, rescato la esperanza de descubrir quién soy hoy y quién puedo llegar a ser mañana.

Reivindico el derecho a soñar, el derecho a luchar por mis sueños y el derecho a la dignidad de mis deseos.




Hoy es mi cumpleaños, el primer día del resto de mi vida y quiero que todos sepan que toda la felicidad que deseo para los demás también la deseo y la reivindico para mí, pues sólo se la podrá llamar felicidad cuando podamos compartirla juntos.